Un viaje relámpago el pasado enero a Manchester...
Fue un placer reencontrarme con Bruce Mee y Khalil Turk para compartir cenas e ideas.
Manchester es una ciudad increíble con un encanto que recuerda a los tiempos de la Revolución Industrial, una época que siempre me ha fascinado y en la que aquí me he sumergido de lleno rodeada de los típicos edificios de ladrillo. Buscando ese ambiente, encontré el Marriott Victoria & Albert Hotel, que lleva el nombre de la reina Victoria y su marido y que encaja perfectamente con este estilo. El hotel ocupa un antiguo almacén entre Water Street y el río Irwell. Se construyó en 1844 para albergar las mercancías que se transportaban por el Irwell-Mersey. Por cierto... si vas por allí...¡¡¡el hotel es más que recomendable en todos los aspectos!!!!
La primera noche allí fuimos a cenar a un maravilloso restaurante Indio. Khalil siempre se encarga de elegir los restaurantes y siempre elige muy a mi gusto...y no soy fácil para las comidas, la verdad. Khalil, Bruce y yo no nos veíamos desde agosto, ¡así que teníamos mucho de qué hablar!
Lo que nunca les perdonaré a ninguno de los dos es que me convencieran para volver andando al hotel desde el restaurante en vez de volver en el taxi que quería coger..... Estoy de acuerdo en que fue un paseo de 10 minutos en buena compañía y estoy de acuerdo en que habría tardado más en taxi... pero no he pasado más frío en mi vida. El paseo se me hizo eterno con un viento frío y húmedo que sólo parecía afectarme a mí. Estaba completamente congelada a pesar de mi bufanda, abrigo, guantes, jersey de lana y botas... y me dijeron que era una tarde suave. Creo que si vienen a Madrid en julio o agosto ya tengo plan para ellos.... les invitaré a dar un paseo a las tres de la tarde :-)
El objetivo del viaje era, sobre todo, firmar las fotografías que se iban a enviar con los primeros CDs. ¡Misión cumplida y con mucho gusto! Pasé un rato muy relajante en una cafetería de Stockport frente a una taza gigante de té de menta y Bruce, que me esperaba pacientemente y me ayudaba a colocar las fotos que estaba firmando. Stockport es una pequeña y encantadora ciudad a unos 15 minutos de Manchester. Pasé poco tiempo allí, pero por lo poco que vi me pareció muy bonita. Sin duda, es un lugar muy agradable para vivir.
Nuestra siguiente cena fue en un restaurante Iraní donde también disfruté de platos típicos iraníes, de nuevo en muy buena compañía. Nos trataron de maravilla y la comida era deliciosa. Me sorprendió mucho que no vendieran ninguna bebida con alcohol .... De todas formas, nunca o casi nunca lo bebo... ¡pero no deja de ser curioso! Allí conocí al mejor amigo de Bruce desde hace 30 años, Jason, a quien podemos culpar de que Bruce eliminase uno de los temas del álbum durante un viaje en coche de cinco horas a un evento de ciencia-ficción: Jason fué el primero en escuchar los temas meses antes de la publicación del disco y pensó que ese tema en concreto no encajaba. ¡Alucinante, por cierto, lo deprisa que puede hablar inglés! Es un tipo genial y muy divertido, lo cual, siendo amigo de Bruce, no me sorprende.
Como volvía a Madrid al día siguiente y no había tenido la oportunidad de ver mucho de Manchester, Khalil se ofreció amablemente a un tour nocturno por la ciudad en su coche. Es una ciudad bonita y animada... llena de estudiantes, con un ambiente joven y relajado. Después del tour, el pobre Khalil pasó mucho tiempo en el coche atrapado en un atasco por culpa de la gente que salía de un megaconcierto (no sé de quién) en el estadio de fútbol de Manchester, que está al lado del hotel en el que me alojaba.
Ya volviendo a Madrid, en el aeropuerto de Manchester entré a curiosear en una tienda de revistas a ver qué revistas tenían allí... Compré Classic Rock porque había un artículo sobre Mike Oldfield y vi (y leí) una estupenda crítica sobre 'Kiss in a Dragon Night'... y entonces me topé con Rock Candy, que empecé a hojear y... ¡Oh sorpresa! También había una crítica muy buena sobre el álbum, así como un anuncio en otra página... ¡Qué sensación tan extraña y maravillosa! Me compré las dos y estuve entretenida durante todo el vuelo.
Un viaje relámpago muy bien aprovechado y rodeada de gente muy especial. ¡Deseando volver!
Un saludo a todos!
Gabrielle
